Hoy día 11 de junio, se ha celebrado en los locales de CGT en Vía Laietana,
la asamblea informativa sobre el plan de pensiones de TB. La asistencia ha sido
mínima, unas 14 personas en total contando la convocatoria de mañana y tarde,
descontando a los miembros sindicales de CGT-PSA y ACTUB. Por el interés que han puesto en comunicar la
asamblea, ningún escrito y una presencia mínima en las cocheras hablando sobre
este tema, era de esperar una asistencia tan baja.
Nos ha sorprendido que convoquen una asamblea en nombre de la
representación social, y sin embargo, en la convocatoria de tarde no asistiera
ningún representante de ACTUB, que tiene la vicepresidencia del plan de
pensiones y miembros dentro de la representación social por parte de los
trabajadores. Sobre este hecho no se han
pronunciado los interlocutores en la asamblea y se ha convertido en una
asamblea de CGT-PSA, con falta de miembros como Mercader, que ha servido para la presentación del
actuario, elegido por ellos sin consultar a los trabajadores.
El discurso del actuario estaba enfocado a vender su producto, no deja de
ser una empresa privada con un interés que es tener el máximo beneficio, el
cual consistía en asegurar que el plan de pensiones de TB no se disolviera ya
que esto asegura su presencia y, por supuesto, unas retribuciones por servicio.
Una de las conclusiones más preocupantes de su discurso consistía en plantear
una “distribución” de los bienes entre los colectivos. El sinónimo de “distribución”
en este caso, para el actuario, es que parte de los beneficios del colectivo C
pasaran al D o lo que es lo mismo, y hablando aún más claro, que el colectivo C
perdiera dinero para beneficiar al D. Al final todos salimos perdiendo con este
planteamiento. Lo más sensato sería, ya que también ha dejado caer que el plan está
en superávit, disolver el plan de pensiones, totalmente justificable ya que la
empresa lleva 2 años sin aportar, y que cada uno traspasara su parte. Para
aumentar la presión con sus planteamientos, su discurso se ha centrado en el
futuro incierto de las pensiones que actualmente se perciben en la jubilación
por la falta de dinero en la Administración. Palabras paradójicas de escuchar
en un local de CGT, cuando es sabido por todos que dinero hay, el problema es
que se invierte para salvar bancos y empresas privadas a costa de los derechos
sociales del pueblo. Para que se mantenga el estado del bienestar sólo es
necesario que el dinero que se recauda vía impuestos, directos e indirectos, se
invierta en beneficio del pueblo, de esta manera la educación, sanidad,
pensiones, etc. no se verían afectada por una “crisis” de derechos.
El resumen de esta asamblea es que ha sido una excusa para justificar el no
haber realizado ninguna por la toma de decisiones anteriores y que ahora tiene
documentación para estudiar qué hacer. Esperemos que con la cantidad de horas
de liberaciones que tienen la aprovechen para tenernos informado y no pase otro
año y medio para la próxima asamblea.
Como punto final y no por ello menos importante, el resto de fuerzas
sindicales y sindicalistas delegados del
comité de empresa no han aparecido para opinar o informa a los asistentes, pero
de estos no nos sorprende.
